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Enebrales:
Aunque en la península Ibérica existen varios tipos de enebros (ver
tabla), la única especie que aparece en formaciones similares a los
bosques, es el enebro
rojo, o Juniperus
oxycedrus (Blanco et al, 1997). El resto de
enebros y sabinas (salvo la sabina albar y la sabina negral), solamente
aparecen en el sotobosque de otras especies, y casi siempre en forma de
arbustos.
| Especies
de enebro (Género Juniperus) |
Principales
características |
| Enebro rojo
|
Juniperus
oxycedrus |
Árbol o
arbusto, con hojas más o menos punzantes, con dos líneas blancas en el
haz. |
| Enebro común |
J.
communis |
Árbol de
hojas punzantes, con una sola línea blanca en el haz. |
| Sabina mora |
J.
phoenicea |
Ver el apartado de la sabina negral |
| Sabina albar |
J.
thurifera |
Ver
el apartado de la sabina
albar |
| Sabina
rastrera |
J.
sabina |
Especie de
porte arbustivo, con hojas escuamiformes que producen un olor fuerte al
frotarlas. |
| Principales
especies de enebros y sabinas (Castroviejo et al, 1986-2012, Blanco, et
al, 1997). |
El enebro rojo o
enebro de la miera aparece en muchos puntos de la
península, aunque es menos frecuente en el norte y en el noroeste
(Blanco et al, 1997). Fuera de España surge en gran parte de la región
Mediterránea, desde Portugal y Marruecos, hasta Irán (Castroviejo et
al, 1986-2012).
Según la obra de Flora Ibérica (Castroviejo et al, 1986-2012), el enebro de la miera (Juniperus oxycedrus),
presenta tres subespecies en España: la subespecie oxycedrus que
tiende a situarse en laderas y llanuras soleadas, la
subespecie badia que
aparece en bosques continentales soleados y secos, y la
subespecie macrocarpa,
que se instala en dunas y arenas costeras, y a veces, en lugares
rocosos.
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Ejemplar de enebro de la miera de gran tamaño situado en el enebral de
El Vellón.
Fotografía de Alberto Díaz, 2014.
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En general, el enebro de la miera (Juniperus
oxycedrus), normalmente tiene el porte de un
arbolillo, aunque a
veces, puede llegar a alcanzar los 15 metros de altura. Su copa suele
tener forma cónica o aovada, y normalmente termina en punta. Las hojas
miden de 8 a 25 mm., están aleznadas, y son rígidas y punzantes. Se
caracterizan porque presentan en el haz, en su cara superior, dos
bandas blancas horizontales. Los gálbulos (los frutos) miden alrededor
de un centímetro, son redondeados y tienen un color rojo o púrpura
cuando están maduros.
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Detalle de la hoja del enebro con las dos bandas blancas
características (imagen sup. izq.). Detalle del
fruto del enebro (imagen sup. der.).
Hojas de enebro
(imagen inf.). Fotografías
de Alberto Díaz, 2014.
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Los
enebros pueden formar bosquetes o pequeños bosques. Estructuralmente,
los enebrales son similares a los sabinares, ambos bosques, tienden a
ser abiertos y poco densos, pero los enebros crean bosques mucho más
pequeños que las sabinas. Los enebros pueden surgir de forma natural,
gracias a que pueden desarrollarse sobre suelos esqueléticos, y ocupar
espacios que no son aptos para las encinas, los quejigos, e incluso los
pinos. Pero también pueden aparecer de forma antrópica, a través de la
tala de encinas o de quejigos, o por el sobrepastoreo, dado que el
ganado prefiere no comer las hojas puntiagudas del enebro (Blanco et
al, 1997).
Pero aunque los enebros pueden llegar a dominar un
territorio pequeño o mediano, normalmente aparecen en bosques mixtos,
mezclados con encinas o pinos, en los claros de los bosques
mediterráneos o en matorrales.
Por ejemplo, en el pinar de pino
piñonero de Cadalso de los Vidrios, que se encuentra en torno a la Peña
de Cadalso de los Vidrios (Comunidad de Madrid), los enebros aparecen
en el sotobosque, aislados y en grupos.
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Enebros (en primer plano) en el pinar de pino piñonero de Cadalso de
los Vidrios (Com. de Madrid). Al fondo, se ve la Peña de Cadalso.
Fotografía de Alberto Díaz, 2014.
Grupo de enebros (izq.) y ejemplar de enebro (drcha.) en el pinar de
Cadalso de los Vidrios (Com. de Madrid). Fotografía de Alberto Díaz,
2014.
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En
cambio, en el enebral de El Vellón (Comunidad de Madrid) se producen
situaciones diferentes. En algunas partes, los enebros estan mezclados
con encinas (Quercus ilex),
en otras partes con pinos y otras especies,
y también hay áreas en las que crecen aislados o en pequeños grupos.
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Ejemplar de enebro junto a dos encinas, en El Vellón (Com. de Madrid).
Enebros en un área con dominio de encinas, en El Vellón (Com. de
Madrid).
Enebros junto con retamas, encinas y pinos, entre El Vellón y El
Espartal (Com. de Madrid).
Enebros junto con encinas y retamas en El Vellón (Comunidad de Madrid).
Masas puras de enebros en el enebral de El Vellón (Comunidad de Madrid).
Fotografías de Alberto Díaz, 2014. |
En
la península Ibérica, los principales enebrales se encuentran en la
comunidad de Madrid en los municipios de Navalagamella, Alpedrete, El
Vellón (ver fotos), El Boalo, Hoyo de Manzanares, Becerril de la
Sierra, Rascafría...; en Salamanca, en Las Villuercas; en Guadalajara,
en los montes de Beleña; en Ávila, en la sierra de Gredos; en Soria, en
la sierra de Toranzo... (Blanco et al, 1997).
A continuación se
muestra una fotografía aérea en la que aparece el enebral de El Vellón
(Comunidad de Madrid), en donde se ven pequeños árboles de enebros
rodeados por pinos y encinas.
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Enebral (con encinas y pinos) situado entre las poblaciones
de El Vellón y El Espartal (Comunidad de Madrid).
Imagen del PNOA © Instituto Geográfico Nacional de España. |
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Continúa en la siguiente
página con los bosques
de araar...
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