9.5. Bosques
Los bosques o
florestas
son conjuntos vegetales o ecosistemas formados principalmente por
árboles, son las formaciones vegetales más impresionantes, dinámicas y
complejas del planeta. Según Ruiz de la Torre (1990) los bosques son
"agrupaciones de árboles en espesura" y para Font i Quer (1953) son
"sitios poblados de árboles o matas" (teniendo en cuenta que Font i
Quer define a los árboles como vegetales de más de 5 metros de altura),
mientras que para Blanco et al (1997) son espacios los que "los árboles
son elementos conspicuos y repetidos en la fisionomía de la formación
vegetal, con independencia de su talla, densidad o grado de sombra
proporcionado por su cubierta".
En general, todos los autores, definen los
bosques como agrupaciones de árboles o formaciones vegetales en donde
predominan las especies leñosas, aunque algunos autores exigen que para
que una determinada formación sea calificada como bosque, los árboles
tengan una determinada altura mínima, deba haber varios estratos y/o
que la actividad humana sea limitada.
Los bosques representan la etapa madura,
estable o clímax, en la sucesión ecológica (series de vegetación), y
son fundamentales para el desarrollo de la vida en el planeta Tierra,
por ello la elevada destrucción de los bosques en el último milenio
debido a las actividades humanas (sobretodo por la agrícola, la
ganadería, la obtención de madera y carbón vegetal, los cambios de uso
del suelo...), es quizás el problema medioambiental más grande al que
se tiene que enfrentar la humanidad.
9.5.1. Funciones de los bosques
Los bosques cumplen
innumerables funciones dentro del sistema natural y
artificial de la Tierra. A continuación se muestran las más importantes
(según Murray, 1998; y otras fuentes):
A nivel natural
destacan las siguientes funciones:
- Mejoran la circulación
hidrológica: los bosques son capaces de
controlar y modular los flujos hidrológicos. Controlan las crecidas de
los ríos, mejoran el drenaje natural, intervienen en la calidad del
agua, filtran y oxigenan el agua...
- Optimizan las
condiciones del suelo: los bosques mejoran la calidad del
suelo, airean el sustrato, aportan materia orgánica, descomponen la
roca madre, favorecen la circulación de nutrientes, controlan la
temperatura y la humedad del suelo...
- Estabilizan el suelo:
las raíces de los árboles son capaces de
prevenir la erosión del suelo y miminizar los movimientos de tierra
(derrubios, desprendimiento de rocas y tierra...). Hay que tener en
cuenta, que la mayor parte de la biomasa de los bosques se encuentra en
el subsuelo en forma de raíces.
- Permiten el reciclaje
de nutrientes: los árboles tienen un papel muy
importante en el ciclo del carbono, del nitrógeno, y de otros macro y
micronutrientes.
- Mejoran la calidad del
aire: los bosques regulan los niveles de
dióxido de carbono y oxígeno, puesto que son reservas de carbono y
producen oxígeno. Además los árboles son capaces de purificar el aire y
mitigar la contaminación de ciertos gases y partículas.
- Influyen sobre el
clima y los microclimas: los bosques influyen en la
temperatura, la insolación, la humedad relativa, las precipitaciones,
la evapotranspiración, las corrientes de viento... Los bosques son
grandes reservas de agua y tienen un importante papel en el ciclo del
agua. A nivel planetario tienen un gran efecto sobre el clima de la
Tierra, y a nivel regional generan microclimas.
- Favorecen la
biodiversidad del planeta: ofrecen cobijo, alimentos y
otros beneficios a la mayoría de los animales del planeta (mamíferos,
aves, reptiles, anfibios, peces, insectos...). Generar hábitats y
ecosistemas en donde puede desarrollarse la vida, favorecen la
biodiversidad y albergan una gran cantidad de biomasa. Además pueden
actuar como corredores ecológicos y pueden conectar espacios naturales.
A nivel antrópico
los bosques:
- Producen alimentos:
los bosques generan una gran cantidad de
productos alimentarios que pueden consumir los seres humanos y/o los
animales asociados a ellos.
- Producen madera:
con la que se construyen edificios, muebles,
instrumentos musicales, herramientas...
- Producen energía:
los bosques durante mucho tiempo han sido la
principal fuente de energía para el ser humano, y actualmente siguen
teniendo un papel destacado. Los bosques pueden generar energía en
forma de biomasa, madera o carbón vegetal.
- Generan importantes
materias primas: los bosques no sólo producen
madera, también son la base de muchas medicinas, tipos de papeles,
tintes, resinas...
- Influyen en las
catástrofes ecológicas: son capaces de prevenir,
reducir o mitigar el impacto causado por el ser humano (como la
contaminación, la instalación de vertederos) y por desastres naturales
(como derrumbes, inundaciones, erupciones volcánicas, terremotos...).
- Mejoran la calidad del
paisaje: indudablemente los bosques tienen un
gran valor paisajístico debido a su gran belleza. Adornan las ciudades
y mejoran las perspectivas visuales.
- Influyen en el precio
del suelo: en el mundo urbano y en el mundo
rural los bosques influyen en el valor en el mercado del suelo.
- Son un espacio de ocio
y de recreo: pasivo (visual, relax...) y
activos (deportes...).
- Tienen un alto valor
pedagógico y turístico: son lugares en donde se
puede aprender a apreciar los elementos de un ecosistema natural y los
valores ecológicos. Además son un reclamo turístico que puede
aprovecharse sosteniblemente.
- Son una fuente de
conocimiento:
queda mucho por conocer sobre el
funcionamiento real de los bosques. En su interior viven una gran
cantidad de especies desconocidas. Permiten conocer las variaciones
florísticas y climáticas de la Tierra, y además saber el uso que el ser
humano le ha dado al territorio.
- Tienen valor
sentimental y social: los bosques despiertan sentimientos
afectivos en las personas. Además estimulan la acción social
comunitaria en la defensa de incendios, en la recuperación de especies
y hábitats, en la creación de asociaciones ecologistas...
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