6.7. Extinciones
La extinción
es la desaparición de todos los
miembros de una especie o de un grupo de taxones. Una especie se
considera extinta cuando muere el último individuo. Determinar cuando
una especie está totalmente extinta es complicado, incluso a nivel
paleontológico, y a veces puede aparecer un taxón lázaro, es
decir, un
ejemplar de una especie que se pensaba que estaba extinta.
El concepto de extinción fue presentado por primera ver por Georges
Cuvier en 1796, pero como se pensaba que las criaturas de la creación
divina jamás podrían desaparecer, pasó mucho tiempo hasta que la idea
fue aceptada. Actualmente se sabe que en realidad, la mayoría de las
especies (un 99%) que han existido a lo largo de la historia del
planeta se han extinguido. El 78% de los géneros y el 72% de las
familias de especies marinas que han vivido en el pasado, actualmente
no existen (Zunino, 2003). Normalmente las especies tan sólo duran de
unos diez millones de años de media (Newman y Palmer, 2009). En el
género Homo,
la especie Homo habilis
duró solamente unos 700.000 años y
el Homo ergaster
unos 1,4 millones (Zunino, 2003); y entre el
microplacton marino los formaníferos duran de media unos 7,7 ma., los
radiolarios 3 y los cocolitofóridos, unos 6,1 millones de años
(Emiliani, 1972, 1982). Aún así, hay algunas especies, denominadas
fósiles
vivientes, que sobreviven prácticamente sin cambios
durante
cientos de millones de años, como los peces celacanto (Latimeria
chalumnae y Latimeria
menadoensis), los triops, las metasecuoyas o los
ginkgos (Ginkgo biloba)
(ver capítulo 2. Evolución de
la biosfera / Las
pruebas de la evolución).
Actualmente el ritmo de extinción está aumentando y por ello, la Unión
Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) es la
encargada de publicar la Lista Roja de Especies Amenazadas. Un catálogo
en donde las especies son clasificadas como amenazadas, en peligro de
extinción, en peligro crítico o especies extintas en estado silvestre
(cuando ya sólo quedan ejemplares en zoológicos o en ambientes
artificiales).
La extinción de una sola especie es un hecho dramático puesto que
significa que ya no va a volver a existir, y porque puede crear un
efecto en cadena dentro de su ambiente (cadena de extinción),
que
provoque la extinción de otras especies de su mismo área (Quince et al,
2005).
Tipos
de extinción (Zunino, 2003).
En función de la
renovación de especies (turnover):
- Extinciones con
sustitución: generalmente hay un equilibrio entre la
aparición de nuevas especies (especiación) y la desaparición de
especies (extinción). Cuando una especie ya no es capaz de sobrevivir
en el área que ocupa, es sustituida por otra especie competidora. La
especie extinta y la que la reemplaza no suelen estar relacionadas
filogenéticamente, sino que tienden a compartir el mismo nicho
ecológico y a menudo su morfología es convergente (Zunino, 2003). Por
ejemplo, durante el Cenozoico las aves y los mamíferos están
desempeñando el papel de los grandes reptiles (dinosaurios) durante el
Mesozoico. En los últimos años, el dingo ha sido introducido por el ser
humano en Australia, sustituyendo al lobo marsupial o demonio de
Tasmania; y en Madagascar, la colonización de los europeos ha provocado
la extinción de gran parte de la fauna local (lemúridos, aves,
tortugas...) y el reemplazo de éstos por animales importados y/o
relacionados con el ser humano como perros, cerdos, cabras... (Zunino,
2003).
- Extinciones sin
reemplazo: cuando se extingue una especie, no siempre
aparece otra para sustituirla. Por ejemplo, ni los trilobites al final
del Paleozoico, ni los amonites a finales del Mesozoico, fueron
reemplazados.
- Pseudoextinción o
seudoextinción: se da cuando desaparece una
especie, pero deja especies descendientes (de la misma línea filética)
que hayan evolucionado a partir de ella (Zunino, 2003). De esta forma,
aunque la especie ascendiente se extinga, su descendiente sigue
existiendo. Por ejemplo, se puede decir que el Homo ergaster se
pseudoextinguió puesto que dio paso al Homo sapiens, al
igual que los
dinosaurios dieron paso a las aves. Algunos cladistas y otras
corrientes taxonómicas no aceptan este tipo de extinción, porque no
aceptan la evolución filética o anagénesis.
- Extinciones de fondo:
es la más común, y consiste en la desaparición
progresiva de una o varias especies a lo largo de cientos o miles de
años hasta no dejar ninguna descendencia. Suele darse por cambios en el
medio o en las condiciones ambientales, a los que la especie no se
adapta.
La extinciones de fondo ocurren de manera continua y con ritmos más o
menos regulares. Son extinciones sutiles que solamente pueden ser
estudiadas en grupos que dejan un abundante registro fósil, como los
gasterópodos marinos. Éstos animales se dividen en dos grupos: unos que
tienen larvas planctótrofas, de costumbres pelágicas durante las
primeras etapas de su vida y otros cuyas larvas son
bentónicas y sedentarias o lecitótrofas. Y se sabe que
durante el Cretácico las especies de gasterópodos con larvas
planctótrofas tenían un periodo de existencia de entre uno y 14
millones de años, con un promedio de seis; y que las con larvas
lecitótrofas duraban un promedio de unos dos millones de años. Después
de la extinción masiva del Cretácico/Terciario desaparecieron el 90% de
las especies de ambos grupos. Por lo que se puede deducir, que al menos
en los gasterópodos, el ambiente es fundamental en las extinciones de
fondo, pero es una cuestión secundaria en las extinciones masivas y
catastróficas (Zunino, 2003).
- Evolución extintiva:
Cesare Emiliani (1982, 1993) estudiando el
microplacton marino (concretamente foraminiferos, radiolarios y
cocolitofóridos, cuyo registro fósil es muy preciso y abundante) llegó
a la conclusión de que no siempre se extinguen las especies que tienden
a reducir al mínimo su área de distribución, sino que en algunas
ocasiones, las especies más abundantes y las que tienen una mayor
difusión geográfica, son eliminadas súbitamente.
Al menos en el microplacton marino, una nueva especie no reemplaza a
otra, sino que parece que debe desaparecer la especie más abundante
para que pueda surgir una nueva. Según Emiliani, cuando una especie
planctónica alcanza un gran éxito biológico (alto número de individuos,
alta densidad y una gran capacidad de difusión), es muy probable que
pueda surgir algún agente patógeno específico (hongo, bacteria o virus)
que pueda exterminarla (Zunino, 2003).
Según esta teoría, las especies que corren el mayor riesgo de extinción
no son sólo las menos comunes, sino también las especies excesivamente
abundantes. La evolución extintiva, puede ser la causa de la
desaparición repentina en el registro fósil de muchas especies
abundantes que fueron eliminadas sin razón aparente.
- Coextinción:
es la pérdida de una especie debido a la extinción de
otra a la que estaba asociada, de esta forma, ambas especies se
extinguen. La desaparición de un anfitrión puede ocasionar la extinción
de su parásito, la pérdida de un herbívoro puede generar el fin de su
depredador, o la extinción de una planta puede conllevar a la
eliminación de sus insectos polinizadores. Por ejemplo, la causa de la
extinción del piojo Rallicola
extinctus pudo ser la desaparición del
huia (Heteralocha
acutirostris), el ave que parasitaba (Mey,
1990).
En función del espacio
que abarquen:
- Extinciones locales:
son pequeñas extinciones que afectan a un
espacio muy pequeño. A veces en una extinción local una especie deja de
existir en un área determinada, pero sigue sobreviviendo en otras
áreas. Por ejemplo, la construcción de la gran presa china de las Tres
Gargantas provocó la extinción (o al menos el declive) del delfín chino
de río (Lipotes
vexillifer), y otras especies.
- Extinciones planetarias:
son aquellas extinciones que afectan a todo,
o a una gran parte del planeta, y en donde son eliminados grandes
grupos taxonómicos.
En función del tiempo y
el número de taxones a los que afecte las
extinciones se dividen en:
- Extinciones normales:
es aquella en que la especie desaparecida no
deja ningún tipo de descendencia en ningún lugar, ni con su mismo ADN,
ni otro evolucionado. Corresponden al ritmo normal de renovación de la
biosfera, y ocurren todos los años.
- Extinciones
catastróficas: extinciones que involucran muchos grupos
al mismo tiempo. Suceden cada 25 o 30 millones de años (Zunino, 2003).
Durante el Fanerozoico hubo unos 20 procesos menores de extinción
(Sepkoski, 1992).
- Extinciones masivas:
extinciones que en un período muy corto de
tiempo (a nivel geológico) afectan a un gran número de grupos de seres
vivos. Como defiende Jablonski (1986), los factores y los caracteres
que influyen en las extinciones masivas y catastróficas son diferentes
a los de las extinciones de fondo; y las extinciones catastróficas
rompen con el liderazgo de los grupos mejor adaptados y da
oportunidades a nuevos grupos.
Las extinciones masivas corresponden con las 5 grandes extinciones
planetarias (más la 6ª extinción provocada por el ser humano), y
ocurren cada 50 a 100 millones de años (ver cap.
2. Evolución de la
biosfera):
1. Extinciones del
Ordovícico-Silúrico, hace aproximadamente 440 y 450
millones de años. Pudo estar causada por el desplazamiento de parte de
Gondwana hacia el polo sur, y eliminó el 60% de las especies presentes
hasta ese momento (Meléndez, 2004).
2. Extinción del Devónico,
hace entre 408 y 360 millones de años. No
está clara la causa de la extinción, pudo ser la acción de las plantas,
la formación de un casquete polar en el sur, meteoritos, aumento del
vulcanismo, cambios químicos en el agua de los océanos... Eliminó al
70-82% de las especies y afectó sobretodo a seres de áreas marinas
tropicales o cálidas, como los corales, los trilobites (en los que sólo
sobrevive un grupo) y los estromatopóridos.
3. Extinción del
Pérmico-Triásico, hace unos 250 millones de años, fue
la mayor extinción de la historia del planeta. Pudo ser causada por el
impacto de un meteorito de hielo o por el aumento de la actividad
tectónica del planeta. Provocó la desaparición del 96% de las especies
marinas, y el 90% de la fauna y la vegetación paleozoica.
4. Extinción del
Triásico-Jurásico, hace unos 201 millones de años.
Provocó la desaparición de muchos arcosaurios, la mayoría de los
terápsidos y los últimos grandes anfibios. La hipótesis más defendida
asegura que esta extinción fue debida a la expulsión de grandes
erupciones volcánicas entorno al actual Atlántico Central (Hautmann,
2012), aunque también se han propuesto otras causas como el impacto de
un asteroide, un gran cambio climático, cambios en el nivel de oxígeno
del mar...
5. Extinción del
Cretácico-Paleógeno o Cretácico-Terciario hace unos 65
millones de años. Fue una gran extinción que eliminó el 75% de las
especies entre los que se incluían dinosaurios, reptiles nadadores y
voladores, ammonites y belemnites, rudistas, gasterópodos, los
foraminíferos, varias familias de peces y anfibios... La teoría más
defendida de la extinción de los dinosaurios y la fauna mesozoica es la
del meteorito caído en Chicxulub (L. y W. Álvarez, 1983), aunque
también pudo ser debida a una alta actividad volcánica, a cambios
orográficos o al colapso de la biodiversidad en el planeta.
6. Extinción del Holoceno
en la actualidad, provocada por la acción del
ser humano.
Período |
Edad
|
Posibles
causas |
Extinciones del Ordovícico-Silúrico |
450-440 Ma.
|
Cambios orográficos y climáticos. |
Extinción del Devónico |
408-360 Ma.
|
Acción de las plantas, formación de un
casquete polar en el sur, meteoritos, aumento del vulcanismo, cambios
químicos en el agua de los océanos... |
Extinción del Pérmico-Triásico |
250 Ma.
|
Desertización del clima, formación de
grandes salinas, cierre de algunos mares, aumento de la actividad
volcánica, impacto de un meteorito de hielo... |
Extinción del Triásico-Jurásico |
201 Ma.
|
Grandes erupciones volcánicas, impacto de
un asteroide, un gran cambio climático, alteraciones en el nivel de
oxígeno del mar... |
Extinción del Cretácico-Paleógeno o
Cretácico-Terciario |
65 Ma.
|
Meteorito de Chicxulub, alta actividad
volcánica, cambios orográficos, colapso de la biodiversidad del
planeta... |
Extinción del Holoceno |
Actualidad
|
Acciones humanas. |
Causas
de las principales extinciones masivas de la historia del planeta. |
Era |
Período |
Extinción mayor
(Afecta
al 96% de especies) |
Extinción intermedia
(Afecta
al 70% de especies) |
Extinción
menor
|
CENOZOICO |
Cuaternario |
|
Extinción del Holoceno |
|
Neógeno |
|
|
E. Plioceno
E. Mioceno |
Paleógeno |
|
Extinción del Cretácico-
Paleógeno |
E. Eoceno |
MESOZOICO |
Cretácico |
|
E.
Cenomaniano
E. Aptiense |
Jurásico |
|
Extinción
Tríasico-
Jurásico |
E.
Titoniense
E. Toarciense |
Triásico |
Extinción
Pérmico-
Triáisica |
E. Carniense |
PALEOZOICO |
Pérmico |
|
|
Carbonífero |
|
|
E.
Gzheliense
Serpukhoviense |
Devónico |
|
Extinción del
Devónico |
E.
Famenniense
E. Givetiense |
Silúrico |
|
Extinción
Ordovícico
Silúrico |
|
Ordovícico |
|
E.
Arenigiano |
Cámbrico |
|
|
E. Cámbrico
E. Vendiano |
Supereón
Precámbrico |
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Principales extinciones masivas,
intermedias y menores de la historia de la Tierra. Sepkoski, J. J.
(1992). |
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